La reciente elección de Rosario Navarro como presidenta de la Sofofa, siendo la primera mujer que llega en ese cargo en 140 años, dio cuenta de la poca participación femenina en cargos de liderazgo empresarial. Aunque se sumó así a nombres como Karen Thal, quien lidera Icare, y a María Teresa Vial, presidenta de la Cámara de Comercio de Santiago, el déficit es notorio. Y la industria fintech no es la excepción.

Según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Chile es el país con mayor rezago de mujeres en la industria de servicios financieros tecnológicos. De hecho, cifras de la misma entidad muestran que en nuestro país solo un 21% de las fintechs tiene alguna mujer como fundadora o cofundadora. Además, en el reciente ChileFintecForum, la presencia de mujeres que expusieron en los diversos paneles fue muy baja en comparación con los hombres.

'El Mercurio' conversó con cuatro mujeres líderes de esta industria: Fernanda Juppet, CEO de Cryptomarket; María Ignacia Jofré, vicepresidenta de FinteChile y CEO de Clay; Carolina Samsing, CEO de Nubox, y Fernanda Vicente, cofundadora de Adah. Ellas analizan el escenario que enfrentan y los desafíos que vienen para emparejar la cancha en temas de género.

Para María Ignacia Jofré hay dos elementos importantes a analizar a la hora de explicar la poca presencia femenina en los puestos de liderazgo del mundo fintech. El primero, señala, es que históricamente ha habido poca participación de mujeres en disciplinas STEM (por su sigla en inglés que se refiere a: ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas), lo que es fundamental para la industria fintech. En segundo lugar, apunta a las secuelas de la pandemia del coronavirus. 'Durante esos años muchas mujeres tuvieron que asumir labores domésticas. En Chile el empleo femenino se vio muy afectado y muchas se tuvieron que retirar del mercado para dedicar más tiempo al cuidado de los hijos', explica la CEO de Clay.

Por otro lado, Fernanda Vicente menciona que en el mundo fintech confluyen la industria tecnológica y la financiera, las que en general han sido espacios históricamente más masculinos. 'Además, el mundo startup en general es muy acelerado, donde se manejan códigos de empresas y financiamiento muy distintos a los de las empresas tradicionales y son muy pocas las mujeres que conocen y manejan esa forma de hacer empresas', dice la cofundadora de Adah.

Carolina Samsing sostiene que esto viene desde el nivel universitario, ya que aún falta para que las mujeres entren en este mercado laboral. En tanto, Fernada Juppet asegura que no es solo un problema a nivel industria, sino que como país. 'Muchas veces las mujeres tienen que elegir porque el tener una maternidad y un cargo C-level, no son cosas compatibles. Yo vengo de una industria muy dura anteriormente, que es la del derecho, donde no se tenía ese espacio', plantea.

No obstante, pese a que a las cifras son bajas en cuanto a la participación femenina, algunas de las principales mujeres que hoy ocupan puestos de liderazgo en esta industria ven con buenos ojos lo que viene. En ese sentido, Juppet asegura que la industria tiene mucho talento femenino y señala que es algo que se ha visto con fuerza desde Woman in Fintech particularmente. Asimismo, destaca el hecho de que se esté avanzando en este tema, permitiendo por ejemplo, el trabajo remoto o la participación por metas, lo que se compatibiliza más con la vida familiar.

'Las mujeres estamos llamadas a cambiar el mundo de las finanzas y la tecnología, proponiendo y creando ideas innovadoras con enfoque de género que se traduzcan en mayor inclusión y acceso a productos financieros más baratos y de buena calidad, que es al final el propósito de la industria fintech', precisa Jofré sobre el rol femenino en esta industria.

Cómo enfrentar la brecha de género

Para avanzar hacia una industria fintech con mayor liderazgo de mujeres, Jofré sostiene que lo primero es tomar conciencia de que existe una brecha de género que hay que combatir. Pese a que ha habido avances, queda mucho por hacer, asegura la vicepresidenta de FinteChile. 'Desde mi punto de vista, lo primero que hay que hacer es visibilizar a las mujeres líderes para así animar a mujeres y hombres a empujar este liderazgo', indica.

Por otro lado, sugiere establecer políticas de igualdad de género y prácticas que la promuevan. 'El compromiso y declaración que tengan los CEO respecto de este desafío es tremendamente relevante', enfatiza. En tercer lugar, propone entregar apoyo a todas aquellas mujeres que deseen emprender en el ecosistema fintech a través de créditos, fondos concursables o financiamientos.

Samsing, por su parte, propone hacerse cargo de este problema y para eso sugiere que cuando los hombres están en un directorio o junto al equipo de liderazgo y no haya presencia de mujeres, se lo cuestionen y las inviten. 'Un consejo que doy es que cuando están entrevistando a personas para algún cargo sean diversos más allá de que después elijan al mejor candidato, pero al menos tener la opción de un 50% de mujeres y 50% de hombres. Así se va nivelando un poco la cancha, porque pasa mucho que al ser una industria de hombres, ellos invitan a otros hombres y eso hay que romperlo y ser proactivos al respecto', menciona la CEO de Nubox. Por último, asegura que este no es un problema solo de las mujeres e invita a los hombres a que sean aliados, visibilicen esto y se hagan cargo.

Fernanda Vicente dice que, a su parecer, cada vez se va a ver más fintechs con equipos fundadores mixtos, 'porque es una industria muy relevante para el desarrollo social y es ahí donde las mujeres van a empezar a crear soluciones para impulsar ese desarrollo'. Sin embargo, menciona que lo que sí va a costar más será encontrar equipos de fundadores de fintechs solo de mujeres, como en el caso de Adah. 'Se requiere una cofounder que lidere la tecnología y hay pocas mujeres con ese conocimiento y además, si agregamos experiencia en el mundo financiero, es aún más difícil de encontrar', menciona. En ese sentido, sostiene que es un camino de doble vía, 'que las fintechs empleen a más mujeres en sus equipos para que tomen la experiencia y eventualmente participación en la empresa, y por otro lado, que mujeres vean a las fintechs como una alternativa interesante para trabajar y aprender de nuevas competencias'.