Acceso sin restricciones, mayor y rápida liquidez, rentabilidad superior, diversificación del patrimonio, resguardo frente a la inflación y transacciones ágiles y seguras, son algunas de las ventajas de la tokenización inmobiliaria, modelo que representa la evolución de la inversión fraccionada y que posibilita invertir en el mercado inmobiliario con montos muy bajos.
Roberto Bascuñán, CEO de Reity —firma pionera en tokenización en el mercado nacional—, explica que el concepto de tokenizar implica la división de los beneficios de la propiedad en múltiples activos digitales, denominados tokens. “Este proceso es posible gracias a la tecnología blockchain, que permite crear, emitir, vender y gestionar tokens de forma segura y transparente, a través de plataformas en línea. Y es así como cualquier persona puede invertir desde $100.000 en los beneficios de los activos inmobiliarios, participando en la rentabilidad generada tanto por el arrendamiento del inmueble como por la plusvalía que se obtiene al venderlo”.
Dicha característica es especialmente relevante en un contexto donde las tasas hipotecarias siguen siendo elevadas, proyectándose que se mantendrán en torno al 4% durante un largo período, y donde el acceso al crédito hipotecario es limitado para la mayoría. Actualmente, solo uno de cada seis chilenos tiene acceso a financiamiento por esta vía, y menos del 20% de la población nacional se encuentra en condiciones económicas de acceder a un crédito hipotecario para realizar el anhelado sueño de la casa propia o adquirir una propiedad para renta.
Variedad
Con la tokenización se pueden realizar inversiones en una variedad de bienes raíces, especialmente en departamentos. “Esta flexibilidad brinda un abanico amplio de opciones de inversión, permitiendo a los interesados diversificar su cartera y participar en diversos proyectos inmobiliarios. Es, además, una herramienta verdaderamente inclusiva, y tenemos usuarios provenientes de diversos segmentos socioeconómicos, regiones y grupos etarios, desde jóvenes hasta adultos mayores, varios con más de 80 años de edad”, destaca Bascuñán.
Asegura que la inversión en tokens puede generar una renta sustancialmente mayor que adquirir un departamento tradicional. “Con las tasas actuales, al comprar un departamento de 2.800 UF con un pie del 15%, en 20 años podrías obtener una renta de $529.000. Sin embargo, si inviertes en tokens durante el mismo período, el diferencial que hoy se produce entre el dividendo versus el arriendo, tu renta podría superar más de tres veces este valor”.
A largo plazo, este modelo de inversión fraccionada se vislumbra como una buena alternativa financiera. A nivel global, está experimentando un notable crecimiento en varios mercados. De hecho, la consultora internacional Boston Consulting Group (BCG) estima que para el año 2030, aproximadamente el 10% del PIB mundial estará tokenizado.
En Santiago Centro, el Edificio Vergara Domeyko se está tokenizando. Reity